Una transición hacia la siderurgia sostenible

A lo largo del tiempo, la siderurgia ha surgido como una especialización de la metalurgia, que se refiere a la técnica relacionada con el tratamiento de minerales ricos en hierro para obtener hierro o distintos tipos de aleaciones que contienen hierro, incluidos el acero, la fundición y los aceros aleados.

Este sector es fundamental para la fabricación y la construcción, pero tradicionalmente ha tenido un impacto significativo sobre el medio ambiente y el consumo de recursos. En las últimas décadas, la industria siderúrgica ha realizado importantes esfuerzos para ser más sostenible e integrarse en la economía circular. Por eso, te queremos aclarar cuáles son los puntos clave sobre los que se puede actuar para apoyar el desarrollo sostenible de este sector.

¿En que puntos clave hay que centrarse para que la industria sea más sostenible?

EFICIENCIA ENERGÉTICA:

Reducir el consumo de energía es esencial para una siderurgia sostenible. Las minas y acerías modernas utilizan tecnologías avanzadas para reducir el consumo de energía, como hornos de coque sin baterías y hornos de arco eléctrico.

RECICLAJE DE CHATARRA:

El reciclaje de la chatarra de acero es crucial para la economía circular. Las plantas siderúrgicas modernas mezclan chatarra reciclada con mineral de hierro virgen para reducir el consumo de recursos naturales.

TECNOLOGÍAS LIMPIAS:

La adopción de tecnologías respetuosas con el medio ambiente, como la captura de carbono y el hidrógeno verde, es cada vez más habitual para reducir las emisiones de carbono y la contaminación atmosférica.

ECONOMIA CIRCULAR:

La industria siderúrgica intenta adoptar plenamente el concepto de economía circular. Esto implica diseñar productos duraderos, recuperar materiales al final de su vida útil y reducir los residuos.

CERTIFICACIONES AMBIENTALES:

Muchas empresas siderúrgicas buscan certificaciones medioambientales, como la ISO 14001, para demostrar su compromiso con la sostenibilidad.

ADOPCIÓN DE LAS MEJORES PRÁCTICAS Y TECNOLOGÍAS DISPONIBLES (MTD):

Esto puede conducir a la evaluación detallada de las plantas piloto y a la identificación de las posibilidades de reducción de las emisiones mediante cambios en los procesos, las materias primas y la introducción de técnicas y tecnologías adecuadas con las que se puedan cumplir los valores límite de emisión, gracias a la identificación de normas tecnológicas adecuadas, sistemas de gestión cíclica y criterios de evaluación de la política industrial decididamente modernos.

Las empresas que se dedican a estas actividades pueden obtener deducciones fiscales y ayudas no sólo por las inversiones en bienes de equipo, sino también por las actividades de innovación tecnológica ecológica que promueven mediante la adopción de MTD y mejores prácticas innovadoras.

Una transición hacia la siderurgia sostenible.

En resumen, la siderurgia sostenible se basa en usar tecnología avanzada, mejorar los procesos y cuidar el medio ambiente y las comunidades cercanas.

Esta evolución es esencial para reducir el impacto medioambiental de la industria siderúrgica y contribuir al objetivo más amplio de una economía circular y sostenible. Además, es posible hacerlo obteniendo réditos económicos tanto en términos de deducciones fiscales y ayudas como de mejora de la notoriedad de la marca mediante actividades de refuerzo interno, pero también de sensibilización de los operadores de la cadena de suministro para que adopten métodos cada vez más eficaces desde el punto de vista medioambiental, remunerativo y social.